Los movimientos ondulatorios (o onda) son, fundamentalmente, de dos clases: mecánicas y electromagnéticas. Las onda mecánicas necesitan un medio material para propasarse; las electromagnéticas no, se propagan también por el vació.
Podemos observar ejemplos de movimiento ondulatorio en la vida diaria: el sonido producido en la laringe de los animales y de los hombres que permite la comunicación entre los individuos de la misma especie, las ondas producidas cuando se lanza una piedra a un estanque, las ondas electromagnéticas producidas por emisoras de radio y televisión, etc.

No hay comentarios:
Publicar un comentario